Si señor, ayer me dí cuenta de que había cometido un lamentable error en mi trabajo. Al menos me dí cuenta antes que nadie lo advirtiera y eso que el error estuvo visible por lo menos una semana. Es de esos errores que si te das cuenta tú, te da la risa, pero si se hubiera dado cuenta otro se me habría caido la cara de verguenza.
Para quien no lo sepa aún, me dedico a la programación web. Es decir diseño programas que generan paginas webs cuya información no es fija sino que cambia, en función de los datos almacenados, de lo que quiera ver la persona que entra en la página y de otras condiciones.
A veces estás cambiando algo en el programa y la página parece no cambiar. En esos momentos empiezas a preguntarte si estás haciendo algo mal o si es algún error tonto, por ejemplo que has modificado la página que no es, que el navegador está usando su caché o simplemente que estás demasiado cansado y estas probando en otro sitio.
En estos casos, lo que yo suelo hacer es poner un texto llamativo en la página para ver que realmente estoy modificando la página correcta. Por ejemplo pongo arriba del todo un texto que diga “Funciona maldito”. Según si veo o no dicho texto, me permite descartar posibilidades y localizar mejor el error.
Después de esta parrafada, aquí teneis la señal que puse en una de las páginas:
Texto Original
Texto modificado para pruebas
Pues bién, por despiste, se me olvido poner las cosas come estaban y lo subí así a internet, para que mi jefe lo revisara y otra compañera hiciera pruebas. Obviamente nadie se dió cuenta del error y así estuvo una semana entera, hasta que yo me di cuenta.
Por cierto, me di cuenta porque fui a modificar otra vez ese texto para hacer el mismo truco y entonces observé que ya estaba modificado.
Pd: Moraleja alternativa que podeis sacar de todo esto: Nadie se lee el título de un web.
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