Un buen día coincidieron dos grandes en una convención de cómic. Stan Lee, el gran arquitecto del “Universo Marvel”. Y Jean Giraud (Moebius), uno de los más grandes dibujantes de comic de Francia. Y decidieron que sería divertido trabajar juntos. Stan Lee dijo alguna vez que uno de sus personajes Marvel favoritos era Estela Plateada (por ejemplo, en esta entrevista). Y Moebius siempre fue un gran dibujante de ciencia ficción. Así que, la elección parecía obvia, y de la unión de ambos gigantes surgió “Estela Plateada, Parábola”
La historia es bastante sencilla. Galactus vuelve a la Tierra y pide a la humanidad que le adoren como a un Dios. Muchos de ellos lo hacen, pero otros se oponen. Y un Norrin Raad que vive escondido entre la humanidad se ver forzado a dar la cara para detener al devorador de mundos.
La historia es una reflexión sobre la religión, los falsos dioses y como pueden ser utilizados para que la humanidad se haga daño a si misma.
Guion de Lee
La trama de esta historia está bien y Stan Lee tiene aquí una escritura más moderna, controlándose un poco en su habitual estilo épico/verborréico. Quizás sea una de las obras más asequibles de leer para un lector no acostumbrado a su estilo.
Pero le encuentro a medio gas. El tema de la religión y los falsos dioses daba para mucho más y creo que Stan Lee no se mete demasiado a fondo (o no quiere meterse). Quizás sea por falta de espacio. La historia es corta, apenas dos números de comic-book. O quizás sea que la religión y Dios es un tema muy peliagudo en USA. Así que entiendo que Lee no se explaye demasiado.
Aunque teniendo esto en cuenta, habría que darle el mérito a Lee de tocar esta temática cuando podría haberse limitado a montar una historia de aventuras espaciales más pulp y a correr.
Otra cosa que me chirría de “Estela Plateada, Parábola” es ¿dónde situamos esta historia? Este comic no parece pertenecer al universo Marvel habitual, pues no aparece ningún otro superhéroe. Y si Galactus camina sobre la Tierra, mínimo que aparezcan por ahí los Cuatro Fantásticos y/o los Vengadores.
Pero por otra parte, esta historia es continuación a la “Trilogía de Galactus“, pues se nos habla de que el devorador de mundos está de regreso en la Tierra y tenemos a Estela Plateada atrapado en la misma.
Tenemos por tanto una historia fuera de continuidad que es secuela de una historia en continuidad. Y que pide saber algo de esa historia anterior. Que cierto es que la “Trilogía de Galactus” es uno de los clásicos imprescindibles de los primeros años de Marvel. Y muchos de los que se acerquen a Parábola lo habrán leído. Pero para el que no la conozca, no va a entender algunas cosas.
Esto lastra a esta historia como tebeo independiente y apto para regalar a ese amigo que no lee cómics o que solo lee cómic europeo. Y me resulta una decisión extraña, porque habría sido igual de sencillo hacer que esta historia fuera la *primera* venida de Galactus. Problema resuelto.
Dibujo de Moebius
Jean Giraud (Moebius) es uno de los grandes de la “bande dessine” franco-belga. Ha ilustrado algunos de las historias más reconocidas de dicha industria, como Blueberry o El Incal. ¿Y aquí? Pues no se, la verdad, también le noto a mitad de sus capacidades.
En algunas entrevista Moebius dejó entrever que no se encontró del todo cómodo con el “método Marvel” por el cual Stan Lee le daba un resumen de la historia, él la dibujaba y después Lee ponía los diálogos. En Francia se suele trabajar con guion completo, detallando lo que se debe ilustrar página a página y viñeta a viñeta.
En general el dibujo se ve menos detallado de lo que Moebius es capaz de hacer. Las figuras humanas están bien, Estela Plateada se ve alienígena y poderoso y Galactus impone como Galactus debe imponer. Pero después los decorados y fondos están poco trabajados. Para lo que Moebius es capaz de hacer. No es un mal trabajo, pero no está a la altura de sus mejores obras.
Conclusiones
Entonces, ¿está bien este Estela Plateada, Parábola? Pues si, está bien. Pero de la unión de dos grandes como Lee y Moebius me esperaba algo más. La sensación que deja es que ambos se limitarán a hacer un buen trabajo, pero ya está, sin más. Sin llegar a la excelencia. Sin siquiera haberlo intentando.
Así que tenemos un buen tebeo, que gustará a los fans de Estela Plateada o de algunos de los dos autores implicados. Pero no creo que sea una obra maestra. Al final se queda casi en una curiosidad.
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